[English here] Mi nombre es Pablo Andres Zuñiga Peregrina. He estado casado desde 1998 con Estela, una mujer increíble que continuamente saca lo mejor de mi persona. Tenemos dos hijos maravillosos llamados Kristin y Duard a quienes educamos en el hogar.
Por parte de mi madre, soy la sexta generación de una familia que busca servir a Dios en diferentes maneras y entornos. Mi tatara-tatara-tatara abuelo Benjamín Pascal fue uno de los primeros ministros presbiterianos nacionales en México que trabajó con el misionero Merrill N. Hutchinson a fines del siglo XIX y finalmente dio su vida enseñando la Biblia. Mi bisabuelo Hazael T. Marroquín fue el secretario de la Sociedad Bíblica en nuestro país a mediados del s.XX y un anciano gobernante de la primera iglesia presbiteriana nacional de México. Mis padres mismos sirvieron a los niños pobres y necesitados que vivían en las calles de Morelia en la década de los 1990’s, dándoles un hogar y enseñándoles la Palabra y un oficio con el que pudieran subsistir. Personas devotas comprometidas con Dios que nos han puesto un estándar muy alto a seguir sirviendo a nuestro Mesías.
Recientemente descubrí que mi nombre significa literalmente “pequeño hombre que peregrina el campo cultivado en la ladera”, no podría ser más preciso. He estado sirviendo a YHVH / Dios en diferentes formas y entornos desde que tenía 15 años y luego comprometí completamente mi vida a Él cuando cumplí 20. Mi esposa y yo hemos ministrado y enseñado su palabra a través de la música, las artes visuales y la enseñanza desde que nos conocimos. A lo largo de los años hemos participado y trabajado activamente con muchas iglesias y ministerios en México y en el extranjero aconsejando, dirigiendo alabanza y adoración, enseñando y también haciendo trabajo administrativo. Nos hemos mudado más de 20 veces y vivido en 6 ciudades diferentes pues constantemente estamos siguiendo la nube y el fuego de Elohim construyendo y enseñando a las comunidades locales de discípulos de Yeshua / Jesús. Esto nos ha traído la alegría de tener muchos amigos queridos en todo el mundo! Desde 2017, hemos estado estableciendo y pastoreando una firme comunidad de creyentes y discípulos de Yeshua en Durango, México, llamada Puerta del Cielo-Sha’ar HaShamayim.
Mi trabajo para el cuerpo de Yeshua es similar al de un arquitecto. Establezco los cimientos, trazo un rumbo y ayudo a construir en la vida y las familias de las personas. Enseño los principios contenidos en la Torá, los Neviim y Ketuvim, a veces llamados el “antiguo testamento”, a través de la interpretación, la enseñanza y el ejemplo de Yeshua y sus discípulos en lo que algunos llaman el “nuevo testamento”. Miramos las escrituras del nuevo testamento a través de la perspectiva y el contexto de hombres hebreos del primer siglo que conocieron y acataron la Ley, los profetas y las escrituras.
Además, una de mis tareas encomendadas por Dios es encontrar y reparar daños estructurales o evitar peligros en el edificio espiritual. Constantemente veo esto en las vidas de las personas, los matrimonios, las familias y las comunidades. Aunque a veces esto es difícil de sobrellevar y no siempre es bienvenido, hago un gran esfuerzo para amar, alentar y guiar a la gente a comprometerse con Dios y estar dispuestos a cambiar por su propio bien de acuerdo con Su Palabra. Junto con mi esposa, que es una gran motivadora y exhortadora, hacemos esto presentando ambos, el posible resultado de permanecer en una condición negativa o pecaminosa así como el resultado positivo de confiar en YHVH y alinear nuestras vidas con Su Palabra. Dejamos el resto a su Ruah-Espíritu. Entendemos que es una decisión de cada persona, pero nos mantenemos cerca para guiar, aconsejar y hacer equipo con aquellos que desean pasar por este proceso.
Dar un testimonio verdadero de amor y obediencia a Elohim con nuestras vidas es nuestro compromiso con YHVH.